Por: Blas ETQ
Pocos saben que soy sinaloense criado en la ciudad de México, y como ya es costumbre en ocasiones viene mi familia de Culiacán a visitarnos.
Emprendimos un viaje directo hacia las pirámides de Teotihuacán, ya que siempre que mi familia viene de visita, sucede que cada que vamos llueve en la zona y no se disfruta al 100%, pero esa ocasión tendría que ser diferente, así que nos subimos en los dos carros en los que viajaríamos y emprendimos el viaje, obviamente como buena familia para ahorrar un poco antes de irnos desayunamos algo.
Salimos a las 12:00 PM hacia la carretera, durante todo el camino estuvimos contando chistes, chistes locales, anécdotas familiares, nos quedamos admirando un poco el paisaje en la carretera o simplemente poníamos música en al carro e íbamos cantando, para que de esa manera el camino no se hiciera tan largo.
Llegamos a las pirámides a la 1:30 PM, ya estando ahí comenzamos a recorrer todo el camino de puestos hacia la entrada, como hacia bastante calor, decimos comprarnos unos sombreros para no sufrir un golpe de calor, ya adentro comenzamos a recorrer todas las hermosas zonas arqueológicas, como la famosa pirámide del sol y la pirámide de la luna, y toda la estructura que lo acompaña.
Al terminar el recorrido decidimos ir a comer cerca de Tulancingo, Hidalgo, que es donde mi abuelita vive, para poder comer uno de los famosos guajolotes y poder disfrutar un poco de las maravillas que puede esconder el estado de hidalgo, así que decidimos recorrer un poco el centro de Tulancingo.
Alas 11:30 PM decidimos regresarnos a la ciudad; apenas entramos a la carretera uno de los coches se descompuso, no supimos que es lo que tenía, dieron las 2:00 AM y seguíamos en la carretera, así que decidimos que nos regresaríamos a la ciudad los que tuvieran que trabajar y los que tuvieran que estudiar y eso fue lo que hicimos, uno de mis primos vino por el resto de mi familia y los demás nos regresamos a la ciudad llegando a las 4:00 AM del día siguiente, ese fue el final de esa aventura que tuvimos, pero no la única.
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